En la Univa PV recordaron a los Santos Difuntos, respeto y amor para ellos
- El altar a Gabriel García Márquez tuvo el primer lugar
- Universitarios, padres de familia e invitados especiales estuvieron presentes
- Se ofreció un verbena popular
Por J. Mario R. Fuentes
Puerto Vallarta
Realmente la comunidad universitaria de la Univa Campus Puerto Vallarta festejó a los difuntos con música y verbena a la que asistieron padres de familia, personal administrativo de esta Casa de Estudios así como estudiantes de bachillerato y licenciatura.
Los altares fueron confeccionados desde temprana hora. No se vieron rostros nostálgicos al recordar a los fallecidos, en ningún momento esta celebración de origen prehispánico dio paso a la tristeza, fue un festejo familiar, de amigos, maestros e invitados especiales, todos disfrutaron el festejo.
Como lo mencionara el maestro Octavio Paz: “Nuestro culto a la muerte es culto a la vida”; no se equivocó el premio Novel de literatura mexicano, porque los pasillos y explanada de la Universidad del Valle de Atemajac rindieron homenaje al que nos dejó en la vida para disfrutar lo mejor de ella y una parte en estas fechas es rendirle el mejor recuerdo.
El festejo se hizo familiar; estudiantes e invitados entraron al concurso de altares, catrinas y calaveritas literarias; siempre observando el respeto a los participantes en todo momento esa fue la tónica. El primer lugar de este certamen fue al altar ofrecido a Gabriel García Márquez. Asimismo se ofreció otra al ex rector de la Univa recientemente fallecido: Monseñor Guillermo Alonzo Velasco; ahí junto se le rindió homenaje a Pedro Infante, Roberto Gómez Bolaños “Chispirito”, Frida Kahlo a Francisco Villa y otra para Emiliano Zapata.
En estas presentaciones destacaron los disfraces de Catrina y Catrín, la lectura de calaveritas literarias y la verbena con platillos mexicanos. Música por parte de los estudiantes de la Orquesta Univa-Rotarios, en fin más de 500 personas llevaron adelante este tradicional festejo a los que ya no están físicamente entre nosotros, aunque su presencia será difícil de borrar.