“Temporada baja” en Riviera Nayarit, una oportunidad para renovarse
- Aunque el número de visitantes disminuye durante el periodo que comprende de septiembre a octubre, las cifras hablan por sí mismas al mostrar un aumento progresivo desde 2007 en ocupación hotelera y afluencia turística.
Riviera Nayarit
En los últimos 11 años la Riviera Nayarit ha registrado un incremento constante en cuanto a ocupación hotelera y afluencia de visitantes en los meses de septiembre y octubre, considerados como la “temporada baja” en la industria turística.
Lo anterior ha sido posible, en gran medida, gracias al trabajo de promoción que realiza la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC) de la Riviera Nayarit en conjunto con sus socios comerciales, labor que se maximiza debido a la estrecha colaboración que mantiene con sus socios hoteleros, expresó el director general de esta oficina de promoción y director de la Asociación de Hoteles y Moteles de Bahía de Banderas (AHMBB), Marc Murphy.
Con base en datos preliminares proporcionados por el área de Estadísticas de la OVC, durante el mes de septiembre de 2018 se registró una ocupación hotelera del 53.69%, marcando un incremento de 2.44% con respecto al mismo periodo de 2017. El porcentaje mejora notablemente cuando comparamos 2018 con el 2007 (año en que hubo una ocupación de 45.40%), mostrando un incremento superior a los 8 puntos porcentuales; mientras que en la afluencia turística la diferencia entre 2018 y 2007 es de 42 mil 382 visitantes, con un incremento superior al 29%.
Renovación hotelera
El director de la AHMBB precisó que si bien el flujo turístico es menor en los meses de septiembre y octubre, es también una oportunidad para que el gremio hotelero renueve su producto turístico con miras al invierno.
En este periodo, agregó, la mayoría de los hoteles aprovecha para llevar a cabo sus obras de mantenimiento y remodelaciones con el fin de seguir siendo competitivos ante las necesidades de un mercado turístico acostumbrado a exigir no sólo buenas instalaciones sino innovaciones que les permitan disfrutar de una mejor manera sus vacaciones.
“Con un turista calificado, es preciso invertir en hacer la diferencia. Con esto se denota la importancia que tiene para hoteles, prestadores de servicios turísticos y la sociedad en general mejorar siempre la experiencia de quienes nos visitan. Cuando se trabaja de la mano, se puede hacer más en beneficio del destino”, mencionó.