“No se puede volver a un modelo autoritario aislado de la gente”: Ramón Guerrero.
Wendy Díaz.
En el marco del mensaje por su Segundo Informe de Gobierno, el presidente municipal, Ramón Guerrero Martínez, destacó que en Puerto Vallarta se trabaja para regresar la voz a los ciudadanos, para aquellos que en gobiernos anteriores sufrieron el olvido, el rezago, y señaló que “el regreso al pasado es inadmisible”, al tiempo que subrayó la cercanía que su gobierno ha tenido con los ciudadanos.
“Somos un gobierno sensible, un gobierno cercano a la gente, un gobierno que ve por los que menos tienen, un gobierno austero; un gobierno que hace más con menos”.
En estos dos años de trabajo se han instituido nuevas dinámicas de participación que desde hace tiempo demandaba la comunidad y exige la democracia.
En la ciudad se destaca la consulta ciudadana de ratificación de mandato, mecanismo con el cual el ciudadano decide la permanencia de los gobernantes y que fue inspirada en la exitosa gestión de Enrique Alfaro Ramírez al frente de Tlajomulco.
Con ese mismo espíritu de empoderamiento de las personas, por primera vez en la historia de Puerto Vallarta, más de 15 mil personas votaron en un proceso supervisado por los propios ciudadanos; el 94% de éstos decidieron ratificar, lo que le da una legitimidad y aprobación al trabajo.
“De ahora en adelante, gobierno que venga deberá someterse a la evaluación del pueblo”, apuntó.
Ramón Guerrero Martínez recalcó que él sólo es el portavoz, las decisiones fundamentales las toman los habitantes, por eso se crearon figuras de participación ciudadana inéditas como el Presupuesto Participativo, en el cual, los vallartenses decidieron a qué obras se destinaban sus impuestos; el Patronato del Centro Histórico y Corredor Turístico, y el Instituto Municipal de Planeación, configurados por 70 % sociedad y sólo 30 % de gobierno.
“Se acabaron las decisiones unilaterales. La nueva forma de definir las políticas y las acciones que relancen a Puerto Vallarta será junto con la sociedad”.
En la visión que tenemos de nuestro modelo de política social creemos que a la ciudad le conviene tener familias sin preocupaciones primordiales y es de donde surgen políticas públicas y programas de gobierno con Casa Digna, mochilas con uniformes y zapatos, y Beca Estudiantil, entre otros.