La Isla del Cuale, un oasis de paz y cultura
La isla del Cuale es uno de los sitios preferidos de los vallartenses y de los turistas, enclavada en medio del río del mismo nombre, y por su privilegiada ubicación, es un oasis de paz para resguardarse del sol y acercarse a la naturaleza y la cultura.
Divide la ciudad entre la Zona Romántica (el Viejo Vallarta) y la Zona Norte; cuenta con restaurantes, un mercado de artesanías al aire libre, flora y fauna y un espacio cultural y escultórico.
Es un sitio enigmático, con una gran historia a cuestas. Antes conocida como Santa Clara o de los Niños, fue el conducto hacia la mina del mismo nombre. El Río Cuale nace en la Sierra Madre Occidental y desemboca en el Pacífico.
Como parte de este recorrido, se encuentra el Centro Cultural Cuale, a cargo del Instituto Vallartense de Cultura. Este espacio recreativo y pedagógico fue fundado en 1983, y en él se ofrecen actualmente talleres de pintura, fabricación de instrumentos prehispánicos, piano, violín, pintura, grabado, escultura, fotografía y teatro.
Cuenta con un auditorio bien equipado para actividades teatrales, proyecciones de cine o presentaciones musicales. Es también un centro de reunión para los amantes del ajedrez. A lo largo del año se realizan centenares de eventos divulgando la cultura de la región.
La Isla del Cuale es un símbolo de la diversidad de escenarios de la ciudad y visita obligada para los visitantes. Sus callejones peatonales y puentes colgantes, son escenografía para los enamorados.
Cuenta también con restaurantes con música en vivo y una variada oferta culinaria. Acompañan a los puestos de joyería, juguetes de madera, sombreros típicos, máscaras, vestimentas de manta, pinturas, títeres y bisutería indígena.
Se aprecia la flora del lugar y esculturas como la dedicada al director de cine John Houston, esculpida en bronce por Carlos Ramírez en 1988, en agradecimiento por promocionar Puerto Vallarta a través de su película “La Noche de la Iguana”.
Resguardado por la sombra de los árboles, el visitante observará construcciones rústicas con pequeños balcones en la ladera que se conectan a la isla por medio de puentes, uno de ellos a la Zona Bohemía, la calle Cuauhtémoc en el Gringo Gulch.