Instaron a defender valores morales, ante la debacle social.
Por: Carmina López Martínez.
Son momentos en los cuales deben fortalecerse los valores humano-cristianos, se dijo durante la homilía de bienvenida que se ofreció a los estudiantes de nuevo ingreso a licenciatura de la Universidad Católica de Puerto Vallarta. Ahí el padre Paulino Topete González, de la orden del Perpetuo Socorro, en interesante mensaje describió diversos tópicos de la vida humana en estos momentos “desviados hacia tentaciones insanas”.
En punto de las 10 de la mañana, en la Universidad del Valle de Atemajac (univa), Campus Puerto Vallarta, se repite cada cuatrimestre la costumbre de oficiar misa para dar la bienvenida a los estudiantes de nuevo ingreso a licenciaturas, en este caso al inicio del ciclo 2015-1. En este sentido, el sacerdote Topete González llamó a los universitarios a no distraerse en situaciones que los puedan llevar por caminos equivocados, estar conscientes que nuestro Señor va con ellos acompañándolos en todo momento. En la vida existe una mística, una forma muy especial para tratar los problemas y vivirlos hasta resolverlos y no solamente explicarlos.
Consuelo y orientación.
Los conceptos, atendidos por los jóvenes reunidos en el Aula ANFECA, permitieron verse como seres innovadores y trascendentales, su cariño por su formación les hizo llegar a ver a su prójimo más allá de un simple ser que existe, ahora lo contemplan como aquél que espera recibir de ellos orientación y consuelo cuando lo requiera, porque para eso existe la institución católica para proponer a personas de servicio una vez que concluyen sus estudios profesionales, es la mística de la Univa Puerto Vallarta.
Profesionales de servicio.
El compromiso quedó establecido: defender y fortalecer los valores éticos morales en toda la comunidad universitaria, dejar constancia de la misión de esta Casa de Estudios con acciones sociales trascendentales y, en lo general, vivirlos para llegar a ser profesionales de servicio a la comunidad en todos los sentidos, en septiembre al cual la Santa Iglesia ha determinado el mes de la Biblia. Se recuerda que el 30 de septiembre se celebra la memoria litúrgica de San Jerónimo, destacado presbítero y doctor de la Iglesia, un gran estudioso de las Sagradas Escrituras.