Desde 1991, la Univa revolucionó el concepto educativo en la calidad
Por J. Mario R. Fuentes
Puerto Vallarta
En estudios históricos se menciona el surgimiento de la educación superior privada con bases claramente religiosas, especialmente relacionadas con la Iglesia Católica soportada en valores de solidaridad y misericordia.
Fue en 1991 cuando el proyecto del entonces rector Monseñor Santiago Méndez Bravo fundador de la Univa (q.e.p.d) detonó la educación en la calidad en este punto turístico. Apoyado por empresarios y familias vallartenses se evitó que los jóvenes fueran en busca de instituciones educativas de nivel medio y superior fuera de su lugar de Puerto Vallarta.
Sus palabras entonces fueron:
“La acción educativa solo puede explicarse desde la necesidad de construir un ser humano capaz de vivir en armonía consigo mismo, con los demás y con el mundo. No se educa solo para ser, sino para ser en convivencia con todo lo existente, incluyendo a Dios”.
“Somos protagonistas de nuestro presente; somos los constructores actuales de nuestra historia. Dios quiere escribir, a través de nuestros corazones, a través de nuestras vidas y la historia de salvación: una historia de amor, de gracia, de vida, de comunión y de santidad”.
Las universidades de culto no surgieron específicamente como una reacción a “un mal servicio” provisto por las universidades públicas, sino como respuesta a la oportunidad de contar con instituciones que lleven a la sociedad, educación con valores y postulados holísticos (del griego hólos-total, todo, entero) este término creado en 1926 por Jan Christiaan Smuts tiene el objetivo de sumar las partes del conocimiento en un todo. La Univa unificó estos criterios.
A partir de estas acciones contenidas en sus programas académicos desde 1991 la Universidad de Valle de Atemajac ha logrado amplio reconocimiento a partir de su perseverancia en apoyar proyectos educativos en la calidad durante 25 años.
El actual rector del Sistema Univa, presbítero licenciado Francisco Ramírez Yáñez ha expresado:
“Es importante educar para lograr una nueva sociedad, para esto se requiere de motivación para ser mejores con planes de estudio dirigidos a una gestión que vaya no solamente hacia la inteligencia a través de normas académicas, sino además agregar los cimientos necesarios para concretar identidad y trascendencia, conciencia del lugar en el que se está y servir a su prójimo para avanzar”.