De gran impacto la Cumbre de Alianza del Pacífico en Riviera Nayarit.
En una entrevista con Efe, el ministro de Economía habló de la agenda de la cumbre de la Alianza del Pacífico (Colombia, Chile, México y Perú) que se llevará a cabo este fin de semana en el centro turístico de Punta Mita, en el estado de Nayarit. Entre los temas más importantes que abordarán en el cónclave, en el que México asumirá la secretaría temporal de la Alianza, estará la definición de los “diferentes mecanismos concretos de cooperación” con los países observadores, un total de 32, apuntó.
La idea es que esos países no solo observen, sino que definan en “qué parte de los compromisos de la Alianza y de la visión” del bloque se quieren “sumar para avanzar en temas integrales”. Por ejemplo, “si estamos trabajando en el tema de cómo mejorar la proyección y el desarrollo de las pymes, a lo mejor hay interés de algunos de los observadores de formar parte de este grupo de trabajo, para concretamente manejar mejores prácticas”, explicó.
Guajardo indicó que “para poder ampliar la influencia de la Alianza”, es necesario mirar hacia otros bloques como el Mercado Común del Sur (Mercosur) o la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN). En lugar de que el bloque “vaya individualmente con cada país”, la idea es que “pudiéramos establecer mecanismos de apertura, de coordinación y de intercambio con organizaciones ya constituidas” para “beneficiarnos mutuamente entre regiones”.
En el caso del Mercosur, “una de las grandes preocupaciones” del mandatario Enrique Peña Nieto y sus colegas de Brasil, Dilma Rousseff, y Argentina, Cristina Fernández, “es el bajo nivel de integración regional que tenemos en nuestras cadenas productivas, a diferencia de lo que ocurre en América del Norte”, abundó.
En ese sentido, dijo, es necesario “establecer mecanismos de facilitación para mejorar el grado de integración de valor agregado” y el diálogo con ese bloque, acordado en una reunión ministerial de la Alianza el 30 de mayo, puede “llevarnos a territorios donde mejorar esas relaciones”. Así, estos acercamientos pueden derivar en “una integración más amplia conforme estos grupos, junto con la Alianza, estén en la mejor disponibilidad de flexibilizar fronteras, de mejorar reglas de integración de origen, de facilitar el comercio”, resaltó.
Los gobernantes de México, Colombia, Chile y Perú también definirán en Punta Mita los mecanismos de adhesión al bloque hacia adelante para “darle mayor dinamismo a la ampliación” de la Alianza, constituida en 2012. Además, abordarán el proceso de incorporación de Costa Rica, que inició formalmente durante el mandato de Laura Chinchilla, y de Panamá, apuntó. Sobre las reticencias expresadas al respecto por el presidente costarricense, Luis Guillermo Solís, quien asumió el poder en mayo, el secretario mexicano confió en que mantenga la decisión de unirse a la Alianza, pero dijo ser “muy respetuoso” del análisis interno sobre el tema.
Solís dijo tener preguntas sobre la velocidad de la desgravación arancelaria, que ha generado dudas en sectores industriales como el agropecuario, y en materia migratoria por la eliminación de visas, las cuales requieren un “análisis más exhaustivo”.
La Alianza firmó en febrero un protocolo comercial que elimina los aranceles del 92 % de los intercambios de bienes y servicios, que entrará en vigor una vez que los Legislativos lo aprueben, lo que ha generado preocupación en algunos sectores de Costa Rica. El ministro mexicano también se refirió a la macrorrueda de negocios de la Alianza celebrada esta semana en Puerto Vallarta, a la que asistieron empresas de China, Corea del Sur y Japón y dijo que se cerraron tratos por más de 250 millones de dólares. Desde su fundación, la Alianza del Pacífico ha despertado gran interés porque en su corta vida ha arrojado resultados concretos para los cuatro países que aspiran a la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas.