Barça y Sevilla, por el doblete en la final de Copa del Rey

Los ”azulgrana”, que tuvieron una semana completa de reposo y de preparación del partido, acudirán a Madrid con su efectivo de gala.

Barcelona, flamante ganador de la Liga, y el Sevilla, reciente vencedor de la Europa League, se enfrentan este domingo (19:30 horas GMT) en la final de la Copa del Rey en un partido en el que ambos buscan hacer el doblete.

Ganar la Copa del Rey ”redondearía una temporada espectacular”, decía el viernes el centrocampista del Barça, Ivan Rakitic, exjugador del Sevilla.

El Barcelona, que defiende el título, podría convertirse en el primer equipo en lograr el doblete Liga-Copa dos temporadas consecutivas, desde que lo logró en las campañas 1951-1952 y 1952-1953.

Pese a su eliminación en la Liga de Campeones, el Barcelona, vigente ”rey de Copas” con 27 títulos, llega pletórico a esta final tras ganar una Liga luchada hasta la última jornada con el Real Madrid.

Sin embargo, enfrente tendrá a un Sevilla que también acudirá al estadio Vicente Calderón de Madrid lleno de euforia tras ganar el miércoles por tercera vez consecutiva la Europa League remontando una final que empezó perdiendo para ganar 3-1 al Liverpool.

               
Sufrimiento
                 
El Sevilla, que sólo ha ganado cinco veces la Copa del Rey, ha hecho sufrir bastante al Barcelona en esta temporada liguera.

Los de Unai Emery vencieron a los azulgrana en su estadio del Sánchez Pizjuán 2-1 antes de perder en el Camp Nou por el mismo resultado, pero haciendo sudar a sus rivales.

”El Sevilla es un equipo que nos ha jugado bien, nos ha presionado bien, ha contragolpeado con mucho peligro y es un equipo que nos trae siempre complicaciones”, dijo este sábado el técnico del Barça, Luis Enrique.

Y en el recuerdo de todos está la apasionante Supercopa de Europa del pasado año en Tbilissi (Georgia): a pesar de ir ganando 4-1 en el minuto 70, el Barça vio como el Sevilla le remontó hasta empatar 4-4, antes de poder ganar 5-4 en la prórroga.

”Conociendo a Emery, habrán preparado todos los detalles”, añadió el viernes el centrocampista croata del Barça.

Los azulgrana, que habrán tenido una semana completa de reposo y de preparación del partido, acudirán a Madrid con su efectivo de gala.

Luis Enrique, que se lleva a toda la plantilla a Madrid, contará con su temible ”MSN”, con un Luis Suárez en estado de gracia, convertido en el mejor goleador de su equipo esta temporada con 59 goles, 40 de ellos en la Liga, donde fue el ”pichichi” de la competición.

El brasileño Neymar también parece haber recuperado su forma tras un bajón, mientras Messi ya marcó tres goles al Sevilla esta temporada, todos de falta.

El argentino fue el protagonista en la final del pasado año frente al Athletic de Bilbao de una carrera antológica para marcar ante los vascos, que perdieron 3-1 ante los azulgrana.

                  
Todo es posible
               
Frente al vendaval azulgrana, el Sevilla también podrá contar con sus figuras como el francés Kevin Gameiro, que lleva 29 goles contando todas las competiciones para intentar perforar la portería catalana.

Emery, en cambio, no podrá contar con su defensa francés Timothée Kolodziejczak “Kolo”, sancionado por supuestamente insultar a un árbitro asistente en la última jornada de Liga.

“Sabemos que como el Barcelona encuentre todo el acierto que suele tener, pues prácticamente estás KO. Pero tenemos muchos argumentos como para pensar que podemos hacer bien las cosas y ganar este partido”, dijo Emery este sábado en rueda de prensa.

El enfrentamiento de dos equipos grandes y dos entrenadores igual de apasionados augura un disputado partido, que se vio empañado de nuevo por una polémica política.

Si el pasado año, fueron los silbidos al rey Felipe VI y al himno nacional por parte de aficionados vascos y catalanes, en esta ocasión fue la decisión de la delegación del gobierno de Madrid de impedir la entrada de banderas indepedentistas catalanas la que disparó la polémica.

No obstante, un juez madrileño revirtió el viernes la medida, lo que ha apaciguado los ánimos dejando paso sólo a lo deportivo el domingo.

Fuente: El Informador