¡A martillazos!
Por J. Mario R. Fuentes*
Insensibles, cobardes ignorantes, corruptos y apáticos la mayoría de los políticos mexicanos se contorsionan para ganar la atención de la sociedad agraviada.
Son millones de litros de saliva, millones de promesas a través de la historia de un país sumamente agraviado, con millones de pobres como herencia de cada sexenio, educación deficiente y jóvenes desnutridos; un panorama deprimente para donde se intente desviar la vista.
El mensaje presidencial fue: “La gallina de los huevos de oro se nos fue secando, se nos fue acabando y de ahí financiamos muchas cosas y cuando el precio del petróleo estaba alto el gobierno tenía excedentes, se nos acabó”; me quedé atorado con el: « ¿se nos fue?».
Mejor dicho se les fue cerrando su caja chica; eso fue para cada administración, por lo menos en las últimas siete, dilapidaron los recursos de la nación en obras de relumbrón; viajes, bonos, autos de lujo, casas dentro y fuera del país, salarios escandalosos y acrecentamiento de los aparatos burocráticos, además de dinero para los partidos políticos para ganar votos; aunque el petróleo es de todos los mexicanos, solamente la oligarquía en el poder gozó de la gallina de los huevos de oro ahora en proceso de extinción.
Que nos expliquen por qué no se construyó la infraestructura necesaria para producir y almacenar gasolina, nuestra propia gasolina y la que importamos de varias naciones; vendimos el crudo para comprar combustibles caros al exterior. Para 2018 arreciará la competencia, qué sucederá entonces, pues evidentemente estaremos en desventaja; nada raro para un país que ha sufrido los peores gobiernos desde terminada la Revolución, algunas excepciones sin duda no han minimizado el abuso.
El mundo está expectante, en especial los mexicanos ante la llegada de Donald Trump a la presidencia del país más poderoso del mundo; tras él sus promesas de campaña, algunas ya en proceso de aplicarse. Lo que no me explico es por qué temer a semejante sujeto, bufón segregacionista tan miserable como su trasnochado discurso. Debe quedarle claro que pierde más su nación que la nuestra, le quiere jalar los bigotes al tigre que lo haga, quedará convencido de que su destino no es la política.
La historia no se ha revisado con el rigor necesario, sobre todo la política; este señor no tiene el menor referente de la responsabilidad con la que trabajaron nuestros compatriotas por la grandeza de su nación, desde abajo, desempeñando los trabajos que otros se negaban a realizar, por pena o por pereza; nuestros hermanos mexicanos los hicieron y levantaron construcciones majestuosas, puentes, fabricaron millones de productos para todo tipo de consumo, no hay un lugar en ese país donde no haya trabajado un mexicano y dejado sudor o sangre y hasta su vida.
Los mexicanos no son asesinos, rateros o delincuentes; no señor Trump, no existe nación limpia de delitos desde tiroteos hasta los más deleznables actos humanos; México no los replica, es un país de leyes y democracia, con defectos no al extremo como se pregona, si fue lema de campaña ahora no hay razón para continuar el hostigamiento. La mano de obra de los migrantes en general y de mis hermanos en particular es sumamente importante para Estados Unidos, si careciera de ella habría encarecimiento de alimentos en esa nación y en otras ramas de la producción, me da la impresión que Trump no se ha sensibilizado en este sentido y su arrogancia puede más.
*Egresado de la UNAM, maestro universitario desde 1979, fue investigador del ICS, conferencista, articulista, inició su trabajo periodístico en la Revista Proceso, jefe de corrección primera plana de diario El Nacional, reportero y columnista; galardonado en varias universidades del país, 21 años trabajó en el sector público y conformó el SNIM en la Coordinación de Productos Básicos de la Presidencia de la República, se integró a la Univa en 1989 como catedrático investigador, cofundador del IDEO-UNIVA actualmente es coordinador de Comunicación y Publicaciones y del Consejo Político Universitario de esta Casa de Estudios en Puerto Vallarta.