Reciben oficiales capacitación en primeros auxilios psicológicos y atención en crisis.
Wendy Díaz.
Ante la importancia que representa el brindar apoyo emocional de forma profesional a las víctimas directas e indirectas de violencia, un delito o a quienes sufren de depresión e intenta atentar contra su vida, el gobierno que preside Ramón Guerrero Martínez continúa capacitando al personal de las diferentes áreas de la Comisaría de Policía Preventiva, Vialidad, Protección Civil y Bomberos.
En esta ocasión, fueron oficiales de Atención Intrafamiliar dependientes de la Jefatura de Prevención del Delito, quienes participaron en un curso taller de primeros auxilios psicológicos e intervención de crisis, con el objetivo de que sean ellos los primeros en establecer contacto con la víctima que requiera atención mental.
Este curso está destinado a socorristas profesionales, voluntarios, policías, bomberos e interesados en adquirir herramientas psicológicas para intervenir en situaciones de emergencia.
Durante el curso se analizaron las diversas características de las intervenciones y el tiempo en que se prolongan las mismas, las consecuencias que estas provocan en la singularidad de cada persona, cómo intervenir, cuándo intervenir y cómo cuidar a la persona que se encuentra en crisis y el cuidado del propio oficial para evitar involucrarse emocionalmente y prevenir situaciones como el estrés postraumático.
Se hizo énfasis en que el padecimiento de la salud emocional es una de las problemáticas más complejas ante situaciones de pánico y todo lo que derive de las crisis, lograr niveles deseables depende de una buena intervención y técnica, por ello la necesidad de estar actualizándose constantemente para brindar atención inmediata y evitar problemas cada vez más graves.
La capacitación fue impartida por Brenda Conde Alonso, psicóloga emergensista, tanatóloga y entrenadora en manejo de emociones a personas agresoras, perteneciente al área de psicología de la Cruz Roja, quien dotó a los elementos de las herramientas necesarias para proporcionar las primeras atenciones de contención a la persona que sufre un incidente, es decir, la intervención psicológica en el momento de crisis.